En la vida, hay cosas que con el paso de los años, van perdiendo su esencia. Cosas que el tiempo va deteriorando sin piedad, sin dejar reflejo alguno de lo que llegó a ser en el pasado. Algo que, quizás, deberíamos considerar normal. Ley de vida.
Sin embargo, siempre hay excepciones. Como en el caso de Luca Toni, delantero italiano del Hellas Verona.
Se encuentra a pocos días de cumplir nada más y nada menos que 38 primaveras, y se puede decir que está atravesando uno de los mejores momentos de su larga carrera. Una carrera en la que ha pasado por equipos como el Bayern Munich, Juventus, Roma o Fiorentina, pudiendo presumir de haberse alzado con títulos como la Bundesliga, Serie A, DFB Pokal, Coppa Italia y hasta el Mundial de Alemania en 2006 con su selección.
Con este historial y con más de 20 años como jugador profesional a sus espaldas, cualquiera podría haber pensado en colgar las botas hace tiempo. De hecho, puede que esa idea estuviese merodeando por su cabeza en Enero de 2012, cuando decidió poner rumbo a Dubai para jugar en el Al-Nasr SC. El típico retiro dorado, en una liga sin nivel competitivo y gozando de un gran contrato.
Pues no. Toni solo aguantó seis meses y decidió volver al fútbol de máximo nivel. Decisión que, sin ninguna duda, fue un enorme acierto. Sólo hay que mirar sus números desde entonces.
Con 8 goles en la 12/13 con la Fiorentina (sólo en Serie A) demostró que todavía le quedaba cuerda, aunque fuera como revulsivo y sin partir de incio.
Sin embargo, la verdadera e inesperada explosión llegó a la temporada siguiente, ya en Verona. Nada menos que 19 goles en la 13/14, habiéndose ganado la titularidad a pulso durante todo el año y manteniéndola en éste, donde a falta de tres jornadas ya ha alcanzado los 19 goles en liga, sólo superado por el argentino de la Juventus, Carlos Tévez. Más meritorio aún si consideramos que Luca Toni forma parte de un equipo cuyo objetivo principal es evitar el descenso, y donde cada gol es un enorme sorbo de oxígeno que les acerca a conseguirlo.
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De hecho, estas son sus mejores cifras goleadoras en los últimos siete años, cuando consiguió anotar 24 goles en sun primer año en el Bayern Munich.
Es evidente que el paso de los años le ha debilitado en muchos aspectos, como el físico a la hora de aguantar los 90 minutos sobre el campo. Pero también ha sabido aprovecharlo para mejorar en otros, como el olfato goleador, los movimientos de ‘killer’ dentro del área, o el saber estar en el campo, aprovechando sus 193 cm de altura para proteger el balón y dar la mejor salida a sus compañeros.
El 30 de Junio termina contrato con el Hellas, y a día de hoy, no hay informaciones esclarecedoras acerca de su futuro. Por la cabeza le deben rondar hechos como que, cuando hizo su debut como profesional en el Modena, jugadores como Mauro Icardi o Paulo Dybala, auténticas estrellas de la liga, todavía no habían aprendido ni a andar.
Quizás esto le haga pensar en colgar las botas en lo más alto o, por qué no, seguir disfrutando y haciéndonos disfrutar con su fútbol. Porque Luca Toni, como el buen vino, mejora con el tiempo.
La Triangulación 